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Un marketplace es una especie de centro comercial virtual en el que las marcas pueden vender sus productos con muchas ventajas competitivas. Lee más.
Un marketplace es una especie de centro comercial virtual en el que las marcas pueden vender sus productos de forma segura, en cualquier horario e incluso en cualquier parte del mundo. Conoce aquí qué es, cómo funciona, ventajas, desventajas y sus diferencias con un e-commerce.
Un marketplace es una plataforma o espacio virtual donde confluyen compradores y vendedores para comerciar productos. Para entenderlo más fácil, piensa en Amazon, Ebay, Aliexpress, Facebook Marketplace o Mercadolibre, entre otros.
En estas plataformas, normalmente, se encuentran todo de tipo de artículos, es decir, los compradores tienen una amplia gama de productos centralizados en un solo lugar y los vendedores, por su parte, una audiencia (en su mayoría) bastante amplia. De acuerdo con Hubspot (compañía desarrolladora y comercializadora de productos de software), “para entenderlo de una mejor manera, pongamos como ejemplo un centro comercial. En este establecimiento las personas pueden acudir a comprar diferentes tipos de productos o servicios; desde artículos de supermercado hasta ropa, calzado, tecnología, gadgets, entre otros”.
Un marketplace tiene muchísimas ventajas con respecto a un espacio comercial físico, pero uno de los aspectos más destacados es que funciona 24/7 y, por lo general, traspasan todas las fronteras. Así mismo, hay otra serie de ventajas en materia de costos, seguridad, posicionamiento, alcance y venta cruzada. En la siguiente imagen te contamos más detalles:
Pero volvamos al ejemplo del centro comercial. De hecho, piensa en tu favorito. 🤔💭
Allí quieres comprar un reloj, unos zapatos y un libro. Seguramente, todos los productos los encuentras en tiendas diferentes, pero además debes hacer tres pagos distintos. En cambio, en un marketplace, aunque los artículos sean de diferentes marcas o las ofrezcan tiendas diferentes, puedes comprar todo con un solo pago.
Los marketplace también tienen algunas desventajas. Estos son cuatro aspectos no tan favorables que debes gestionar para convertir en oportunidades:
Los marketplace deben garantizar el soporte al cliente y al comerciante. Asegúrate de que la plataforma tenga diversos canales de atención. Algunos no lo ofrecen y puede ser una desventaja.
Estas plataformas cobran a las tiendas algunas tarifas o comisiones. El comerciante debe adaptarse a las reglas y debe gestionar las variaciones en los gastos.
Al ser una plataforma tan atractiva para el comercio, seguramente tu competencia también estará ahí, literalmente, en el mismo espacio virtual que tú estás.
Es difícil posicionarte entre los consumidores porque la plataforma no es tuya. Es decir, no puedes utilizar los elementos característicos de tu marca, sino que debes adaptarte a los del marketplace.
El 45 % de las compañías que venden online tiene presencia en los principales marketplace. Los sectores que más confía en estas plataformas son alimentación y bebidas (74 %), salud y farmacia (64 %), electrodomésticos, hogar y jardín (57 %), moda, ropa y complementos (53 %). Así lo reveló el estudio Evolución y perspectivas e-commerce 2019.
A lo largo de este artículo hemos hablado de marketplace, pero ¿dónde queda el e-commerce? ¿Cuáles son las diferencias entre ambos? ¿Por qué debería implementar un e-commerce o vender a través de un marketplace?
Aunque ambas son plataformas digitales, un e-commerce es una tienda virtual donde la marca o negocio vende sus propios artículos o productos, mientras que, el marketplace es una plataforma virtual (como Amazon o Mercadolibre) a disposición de cualquier usuario, marca o negocio para comprar y vender productos.
Para que lo entiendas mejor, te compartimos las seis principales diferencias entre un e-commerce y un marketplace:
Hacer negocios en un marketplace es bastante sencillo, pero hay varias normas y procesos que debes tener en cuenta. Lo primero es registrar tu empresa-negocio y tus productos. También debes estar pendiente de la comisión por intermediación que cobra la plataforma, ya sea Amazon, Ebay, Aliexpress o Mercadolibre, entre otros.
Según el sitio Rocketcontent, “la comisión corresponde a un valor que va del 9,5 % al 30 % de cada venta realizada. La variación corresponde al nivel de divulgación que solicites durante el registro: cuanto mayor sea la visibilidad de tus productos, mayor será la comisión”.
Una vez cumplas los requisitos necesarios, tus artículos comienzan a exhibirse en la plataforma. Igualmente, pueden aparecer en encuestas o como sugerencias de acuerdo con las intenciones de búsqueda y compras de los usuarios.
Con toda esta información, es importante que evalúes la viabilidad en tres aspectos:
Margen de ganancia: ¿el margen es superior al costo de producto más la comisión?
Volumen de ventas: ¿la cantidad de ventas compensa el margen?
Rentabilidad: ¿crecerán tus ventas, pero disminuirá tu rentabilidad?
Por otro lado, debes saber que las plataformas tienen diferentes plazos para pagarte el valor de tus ventas. En este sentido, el blog de Rockcontent menciona que “este plazo varía de 2 a 45 días contados a partir de la publicación o entrega del pedido. Es una manera de garantizar la atención adecuada a los clientes”.
Por último, y aunque parezca obvio, revisa detalladamente las políticas del marketplace, pues allí se especifican las normas y condiciones que, desde luego, debes cumplir si quieres estar allí. No cumplirlas puede implicar una penalidad económica o ser retirado de la plataforma. Sin embargo, tal vez el mayor riesgo no sea solo económico y operativo, sino reputacional, porque al final el nombre de tu negocio es el que quedará por lo alto o por lo bajo.
Para lograrlo primero debes conocer los gustos y preferencias de tus clientes. Esto te permite tener foco para ofrecerles lo que realmente quieren comprar. Así mismo, es importante que busques aliados en las categorías favoritas de ellos para crear promociones.
Existen tres tipos de marketplace:
De productos: sirve para vender y comprar cualquier tipo de artículo o bien.
De servicios: ofrecen servicios como reserva de hoteles o compra de entradas, entre otros.
Laboral: sirve para conectar empresas con profesionales o viceversa.
Finalmente, dos grupos de marketplace:
Generalista: pueden encontrarse productos de diferentes categorías.
Vertical o de nicho: se especializa en una categoría específica.
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